Seleccione idioma

Spanish

Down Icon

Seleccione país

Spain

Down Icon

Fabiana Ricagno: "Pude escribir este libro como consecuencia de la vida que tuve"

Fabiana Ricagno: "Pude escribir este libro como consecuencia de la vida que tuve"

En Que quede entre nosotros (Metrópolis Libros), Fabiana Ricagno abre las puertas de su memoria para narrar, con una prosa íntima y conmovedora, el proceso de despedida de su padre. El libro arranca con una escena de dolor y presencia ausente, pero se despliega como un viaje hacia atrás, recorriendo su infancia en Martínez, su juventud y la vida adulta, hilvanadas con las tensiones, vínculos y silencios familiares que marcaron a fuego su historia. Es un relato personal que, sin proponérselo, también reconstruye la Argentina de las últimas décadas a través de lo cotidiano.

Empresaria, abogada, activista por la igualdad y diseñadora, Ricagno da un giro inesperado hacia la literatura con su primer libro, escrito desde la necesidad de preservar la memoria y conjurar el olvido. La figura de su niñera, el universo femenino de la infancia, las amistades, las contradicciones familiares y el pulso de los años 60, 70 y 80 configuran una obra cargada de humanidad. Su voz, la de una niña que observa y siente, es el anclaje emocional de una narración que se atreve a nombrar lo silenciado.

"Fafi" se define a sí misma como “porteña curiosa y andariega”. Estudió abogacía y ciencias políticas, y creó en 2009 Telteco, empresa líder en servicios de consultoría e implementación en despliegue y conectividades de telecomunicaciones, provisión de equipos tecnológicos y logística y en 2018 fundó la organización Pollera Pantalón para promover la participación de mujeres en espacios de decisión de los sectores privado y público. En 2020, lanzó en Italia su marca de zapatos, Ricagno, con diseños de lujo para el mercado internacional. En 2024 fue nombrada Presidenta de la Asociación Yad Vashem Argentina. Que quede entre nosotros es su primer libro publicado.

–¿Cómo surgió la idea del libro?

–Escribir fue la primera forma que encontré de resistir que lo no dicho se transformara en no vivido y, al final, se perdiera. El lenguaje con el que sentí que el relato fluiría de manera más genuina fue mi voz de niña porque expresaba directamente mis memorias. Entonces imaginé un hilo que conectara la despedida de mi padre con mi infancia y surgió la trama del libro: una narración que concentra la magia de mi vida alrededor del exorcismo de un maleficio que marcó a mi familia. El libro fue construido con la convicción de ganarle al olvido y asegurar que el cuento no se fuese conmigo. Hace muchos años, nació en mí la necesidad vital de darles voz a los protagonistas de esta historia, a veces silenciados para eludir rótulos dolorosos. Publicar es el cierre de este capítulo; cada cosa con su nombre.

Fabiana Ricagno. Foto: Emmanuel Fernández.Fabiana Ricagno. Foto: Emmanuel Fernández.

–De alguna manera es la historia de la vida cotidiana de los años ’60, ‘70’ 80 y los Noventa, ¿cómo fuiste construyendo ese cotidiano?

–Precisamente, desde lo cotidiano. Cada década estuvo muy marcada por signos políticos, ideas, modelos económicos, que se tradujeron en experiencias representadas en tipos de negocios, hábitos de consumo, lugares de reunión. Yo recorrí mi vida a través de los espacios físicos propios de mis días en cada época. No sólo en términos de lugares de interés, barrios, ciudades, sino especialmente desde la percepción propia de la edad que tenía. De la niñez pequeña y abrazada por un entorno protector de hogar, familia, escuela, amigas, paseos y compras en la república de Martínez, a la madurez desnuda en los nodos médicos del AMBA donde la vida se apaga en sanatorios con infraestructura de alta tecnología, médicos de todas las especialidades y voces desconocidas en cada rincón.

–¿Cómo construiste ese relato tan vívido?

–Pude escribir este libro como consecuencia de la vida que tuve, incluidas la lenta despedida de mi padre y la súbita partida de mi madre, que fue la mentora de mi perseverancia. Debía escribir, era imprescindible, para abrazarlos, para contarles que siguen conmigo, y para dejar tantas vivencias y enseñanzas impresas como una forma de transmitir su legado. Con esto quiero decirte que el relato vive en mí. El desafío real fue encontrar palabras que lo expresaran con fidelidad. Seguramente algunas personas crean que es más sencillo construir una historia que no es ficción pura. En mi caso, fue todo lo contrario; narrar un cuento que no es cuento, donde participan tantos personajes tan respetados por mí, significó exigirme estándares muy altos de cuidado y creatividad para lograr una obra literaria atractiva y de calidad que estuviera a la altura de sus protagonistas.

–La niñera también cobra un rol fundamental.

–Sí, Irma es un personaje sustancial. Y es real en todo sentido: realidad-ficción en la obra literaria, y las dos caras que conviven en la mayoría de las personas con las que nos vinculamos de manera habitual. Además de ser central en la trama, Irma representa muy bien cuál es la voz que relata esta historia: la de una niña que veía en ella la versión santiagueña de Julie Andrews en La Novicia Rebelde, mismo corte de pelo, aunque negro. Lideraba una hilera de chicos del barrio en Martínez, recogiendo la falda de sus vestidos estampados, cantando y corriendo...lo daba todo. Hoy, adulta, veo una persona que descargó su resentimiento sobre una familia que la había abrazado, y una bruja que me regaló un lindo personaje para este libro.

Fabiana Ricagno. Foto: Emmanuel Fernández.Fabiana Ricagno. Foto: Emmanuel Fernández.

–Las amigas de la infancia son otro capítulo, ¿no es cierto?

–Aún conservo algunas, y todavía nos acordamos de esos lugares tan propios donde nos divertíamos. De otras, podríamos hacer algo más que un capítulo. La vida me regaló una niñez de abundancia, que sólo me dejó ver cosas maravillosas de mis amigas. Después llegó Irma, la adolescencia y las verdades incómodas detrás de ciertas nenas que integraban mi círculo íntimo. Pero esos diablillos déjame guardarlos, necesitan maquillaje para brillar en mi próximo libro.

Que quede entre nosotros, de Fafi Ricagno (Metrópolis Libros).

Clarin

Clarin

Noticias similares

Todas las noticias
Animated ArrowAnimated ArrowAnimated Arrow